29 abr 2008

Silencio

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Mi madre es de esas personas que no se callan nunca, no tipo Chicas Gilmore, que redundan en un tema por horas, sino de esas que les molesta el silencio, y apenas lo siente venir, debe rellenar con cualquier cosa, - mira que lindo el adorno - han estado tan ricos los días - voy a ir al baño y después voy a ir a buscar mi cartera para salir al super.

Cuando el silencio empieza a alojarse en sus oídos, comienza con una seguidilla descriptiva de todo lo que ve (y de lo que todos vemos), y cuando se acaba la escena, nos cuenta todo lo que hizo y lo que piensa hacer el resto del día.

Para los que me conocen, deben estar pensando ¡que patuda! pues soy universalmente conocida por hablar mucho (y por exagerada) pero hablo cuando en verdad quiero comunicar algo, y eso sucede muy a menudo, pero no soy buena para rellenar, y por otra parte disfruto mucho del silencio, a veces también es una forma de comunicarse, incluso en masas. Si el tema no me interesa, o no tengo nada que decir, simplemente me callo, y ya está.

Mi padre no puede manejar sin la radio prendida, supongo que esperando que ella se vea atraída por las noticias y cierre su bocota.
Yo la evito.

Hablar es entretenido, pero hay que cachar cuando molestas a otros.
No se si soy la mas indicada para hablar de esto. Pero sin duda no estoy en el mismo saco que mi madre.

Enjoy the silence - Depeche Mode

13 Comments:

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA said...

Hola Pacita:
He recalado en este blog por esas raras casualidades de la vida. Quiero dejar la huella de mi paso por aquí y decirte que me encanta como escribes, como plasmas tus ideas, y bueno, calladito para no competir con tu madre, jejeje. Un placer.
Tadeo

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA said...

Hola Pacita:
Gracias por pasarte por mis blog, y sobre todo por hacerlo a esa velocidad tan "supersónica". Mirando en tus ojos (y no me dedico a leer el iris) sé que eres una gran persona.
Besitos.
Tadeo

Rantes said...

prefiero por mucho el silensio a las palabras innecesarias, pero la madre es la madre, y todas hablan demasiado.....

un abrazo

chau

Rantes said...

sorry, no se como salio ese "silenSio", quise decir silenCio

Anónimo said...

La verdá, es que estamos frente a un caso unico. Afirmo y reafirmo todo lo que comentas sobre tal madre tuya (y mia jeje), la cual sin tener otro que hacer en le dia se dedica a intentar de llamar la atencion de sus pares, hablando sobre tmas que a nadie le importa o sin mayor informacion importante, simplemente escucharla seria una despilfarro de tiempo. tratando de no hacer competencia con las personas ya mencionadas y "posteadores", termino diciendo que la virtud esta en poder distinguir cuando hablar y cuando no; virtud que todavia no logro :S.

Anónimo said...

Jajajajaja pobre tu mamá.... hay personas que odian el silencio y otras lo disfrutan..
Coincido con tú, aunque muy buena para hablar soy, pero para rellenar nones... ni contando chiste salvo. Por lo mismo, hay que saber cuando hablar, cuando dusfrutar del silencio y cuando hablar hasta por los codos.. Aún así... pobre tu mamá jajajajajaa.. sorry.. pero me causa risa...


Saludos pa' tú

esteban lob said...

Ustedes los dentistas tienen la solución para hacer callar a quienes gustan de hablar mucho.

Con una máquina en la boca, es imposible mantener ese hábito.
¡Y con anestesia, peor!

Un abrazo.

Angela Ulloa said...

Hay un ejercicio interesante que descubrí hace un par de años, por razones que no viene al caso explicitar.

La cosa es que todos nosotros somos como somos por una muy buena (o al menos concreta) razón. No es azar que tu mamá hable mucho, no es azar que tú disfrutes del silencio, tiene que ver con nuestra historia.

Probablemente (y esto ya es pura conjetura) tú no hablas cuando no tienes nada interesante que decir, porque has visto lo que es estar con una persona que habla todo el rato. Tu historia personal te ha enseñado eso...

y entonces la pregunta es ¿Qué hay en la historia de tu mamá, que le hace temer el silencio? ¿Con qué lo estará asociando? ¿Qué habrá significado el silencio durante su infancia?

Uno no hace estas reflexiones con sus propios padres, porque generalemnte estamos tan cerca, que los árboles no nos permiten ver el bosque.

Pero yo no dejaría de hacerme la pregunta ;)

Cariños

Alejandra said...

Yo soy todo lo contrario, callada y hablo más cuando estoy entre amigos o con especiales ganas. Reconozco que me aburre la gente parlanchina y me alejo... y si alguien no puede estar en silencio, de plano me huele mal...
Saludos

 kotto said...

Yo soy muy callado ... ashora si agarro confianza no me para nadie jajaja
Oye pacita que peladora con tu santa madre ehhhh... te apuesto que a su edad tú seras igual... jajajaja

un abrazo peladora no ma'

La implosion en Venezuela said...

Hola Pacita mucho gusto...A mi edad (55) que tanta me hace la voz de mi Padre..,cuando se nos van..,es cuando
nos retractamos...todo en su momento..,y hay que vivirlo..,cada quien con su juicio...Ah! no tan solo hablar por hablar..,también escribir por escribir...
Unaco

Unknown said...

uuuu, cuanta falta hace el silencio de vez en cuando...

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA said...

Querida Pacita:
Gracias a este post te conocí. Como bien dije, preferí quedarme callado, y que bien me hizo ese silencio, jejeje.
Sólo diré que me parece muy interesante la reflexión que hace aquí la Ángela. Tal vez tu madre tema al silencio, y seguramente tú habrás aprendido lo sano que resulta a veces, hablar cuando se tiene algo bueno que expresar.
Tal vez ese silencio inquiete a tu madre por alguna razón.
Besitos:
Tadeo